Actividades y juegos para mejorar la competencia comunicativa en la infancia

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Cada vez es más frecuente utilizar actividades y juegos para mejorar la competencia comunicativa en la infancia. El juego es un recurso dinamizador muy efectivo para fomentar la competencia lingüística en la infancia. A través del juego, los niños y las niñas pueden desarrollar diferentes habilidades lingüísticas, como la comprensión, expresión y producción de lenguaje.

El juego es una actividad lúdica que permite que los niños y las niñas se sientan más relajados/as y cómodos/as en un ambiente no formal, lo que les permite expresarse con más naturalidad y creatividad. Además, el juego permite la experimentación y la exploración, lo que ayuda a los/las menores a ampliar su vocabulario y mejorar su gramática.

Beneficios del juego

El juego como recurso dinamizador de la competencia lingüística tiene muchos beneficios para el desarrollo de los niños y las niñas. A continuación, te presentamos algunos de ellos:

  • Favorece la expresión verbal, permitiendo que los/las niños/as puedan expresarse con más naturalidad y creatividad. 
  • Fomenta la escucha activa. A través del juego, los niños y las niñas deben prestar atención a lo que los/las demás dicen para poder participar adecuadamente, lo que fomenta la escucha activa.
  • Amplía el vocabulario, mediante la exposición a nuevas palabras y expresiones.
  • Mejora la gramática. Al jugar, los niños y las niñas utilizan el lenguaje de manera más informal, lo que les permite experimentar con diferentes estructuras gramaticales y mejorar su uso del lenguaje.
  • Fomenta la comunicación no verbal, a través de la expresión facial, el tono de voz y los gestos.
  • Estimula la creatividad e imaginación, permitiéndoles desarrollar nuevas formas de comunicación. 
  • Promueve el trabajo en equipo y la cooperación. 
  • Favorece la resolución de problemas. Algunos juegos requieren que los/as niños/as resuelvan problemas o desafíos, lo que les ayuda a desarrollar habilidades de pensamiento crítico y resolución de problemas.

Juegos para fomentar la competencia lingüística en edad infantil

A continuación, te exponemos algunos ejemplos de cómo el juego puede ser utilizado como recurso dinamizador de la competencia lingüística en la infancia:

  • Juegos de mesa. Los juegos de mesa, como el Scrabble o el Bananagrams, son excelentes para mejorar la capacidad de ortografía y vocabulario de los/as niños/as. Estos juegos también fomentan la capacidad de comunicación, ya que los/as participantes deben explicar sus estrategias y pensamientos a los demás.
  • Juegos de roles. Son excelentes para fomentar la capacidad de comunicación en la infancia. Los/as niños/as pueden asumir diferentes roles y comunicarse entre ellos para resolver situaciones o problemas.
  • Juegos de palabras. Los juegos de palabras, como el “veo, veo” o las adivinanzas, resultan excelentes para fomentar la capacidad de expresión y comprensión verbal en la infancia. Estos juegos también fomentan la creatividad y la imaginación.
  • Juegos de preguntas y respuestas. Los juegos de preguntas y respuestas, como el Trivial o el Quién es quién, son magníficos para fomentar la capacidad de retención y expresión verbal en la infancia. Estos juegos también fomentan el pensamiento crítico y la capacidad de argumentación.
  • Juegos de lectura. Los juegos de lectura, como el “lectura en cadena” o el “teléfono roto”, son excelentes para potenciar la capacidad de comprensión lectora y expresión oral en la infancia. Estos juegos también aumentan la capacidad de escucha activa y la interpretación de la intención comunicativa.
  • Debate. Este juego consiste en que los/las participantes debatan sobre un tema en particular, exponiendo sus puntos de vista y escuchando los argumentos de los demás. Esto mejora la capacidad de escucha activa, la argumentación y el pensamiento crítico.
  • Improvisación. Esta actividad consiste en que los/as niños/as creen una historia o una situación a partir de un elemento aleatorio, como una palabra o un objeto. Esto fomenta la creatividad y la capacidad de improvisación en la comunicación.
  • Charadas. Este es un juego clásico que consiste en que un/a participante debe comunicar una palabra o frase sin utilizar palabras, sólo con gestos y mímicas. Los demás participantes deben adivinar de qué se trata. Esta actividad mejora la capacidad de expresión no verbal y la interpretación del lenguaje corporal.
  • Narración de historias. Esta actividad consiste en que los niños y las niñas creen una historia en grupo o individualmente y la narren a los demás. Esto fomenta la capacidad de organización de ideas, creatividad y habilidades narrativas.

En conclusión, el juego es un recurso dinamizador muy efectivo para fomentar la competencia lingüística en la infancia. Los niños y las niñas pueden desarrollar diferentes habilidades lingüísticas a través del juego, mientras se divierten y aprenden de manera lúdica.